
El Torcal de Antequera, ubicado en Málaga, al sur de España, nos sorprende con uno de los paisajes kársticos más hermosos de Andalucía. Este paraje natural reconocido como Parque de la Reserva Natural goza del privilegio de ser Zona Especial para la Protección de las Aves y es además un excelente destino para unas vacaciones rurales muy diferentes.

Naturaleza e historia en El Torcal
Sus orígenes se remontan a la Era Mesozoica, en el que el lugar constituía un alargado pasillo marítimo que comunicaba, desde el golfo de Cádiz hasta Alicante, los primitivos océano Atlántico y el mar Mediterráneo.
El Torcal está constituido por rocas calizas que tuvieron su origen en el fondo del mar durante el periodo Jurásico, hace entre 250 y 150 millones de años. La erosión y hundimiento de las grietas que le conformaban produjo lo que hoy llamamos callejones y una compleja construcción natural a la que le hemos atribuido semejanzas con formas cotidianas; como “el tornillo”, “el sombrerillo”, “el adelantado”, “el ataúd”, “los prismáticos”, “el cáliz”, “el dado”, etc.
Cómo llegar y qué hacer en El Torcal
El Torcal es accesible por carretera asfaltada desde el pueblo de Villanueva de la Concepción, en la provincia de Málaga, por la carretera A-45 de Andalucía. Este es el el camino a seguir si viajáis desde Málaga:
Existen dos rutas de senderismo clasificadas por colores (Verde y Amarilla) de 1.5 km, 2,5 kilómetros y de 4,5 km de longitud, que incluyen maravillosos paisajes, mayormente visitados en primavera y otoño, debido a las temperaturas extremas.

Caminar entre estas construcciones naturales es indescriptible, entre sus laberintos de paredes de piedra y buscando entre ellas figuras conocidas. Por ejemplo, una de las más conocidas es “el tornillo”, puesto que además de ser el símbolo del paraje, nos muestra una figura muy peculiar del paisaje.
Cabe resaltar a los “árboles de piedra”, los cuales crecen curiosamente entre las grietas de las altas formaciones rocosas con otras formaciones endémicas y gran variedad de orquídeas.
Además, El Torcal nos muestra su gran despliegue en cuanto a fauna se refiere; podremos ver durante nuestros paseos algún ejemplar del halcón peregrino, el cernícalo, el gavilán, diferentes tipos de águilas, el búho real o el buitre leonado, y con un poco de suerte, quizás veamos alguna cabra montés de roca en roca, y así concluir nuestra ruta con un magnífico broche de oro.

Respecto a las dos rutas de senderismo disponibles, cabe destacar:
- La ruta Verde discurre por el Torcal Alto, mostrando un desarrollado paisaje kárstico que le dejará fascinado.
- La ruta Amarilla, atraviesa el conocido Torcal Bajo, menos accidentado que el anterior pero menos maravilloso en cuanto a paisaje.

Si pasas por Antequera o Villanueva de la Concepción, no olvides visitar El Torcal y disfrutar de las fiestas y tradiciones de Villanueva de la Concepción; como el Festival de Verdiales (julio) y la Feria de agosto.